13/12/2016 – El Pozo Múrcia elimina a los colomenses en los cuartos de final de la Copa del Rey.
Para vencer a cualquiera de los tres grandes de la liga es necesario hacer el partido perfecto y, por encima de todo, no dar excesivas facilidades al rival. Precisamente este seria el ‘pecado’ cometido por Catgas Energia durante dos minutos iniciales para olvidar.
Los discípulos de Óscar Redondo empezaban el encuentro mostrando su versión más desconectada, alejados del nivel de concentración necesario para jugarse el pase a unas semifinales de Copa del Rey. En tan sólo dos minutos, los regalos concedidos por los jugadores colomenses dejaban el marcador en un 0 a 2 favorable al Pozo, después que Rafa López (1’) se marcara en propia puerta intentando corregir una pérdida de balón (0-1) y que Miguelín (2’) resolviera libre de marca una jugada por el carril central (0-2).
El desconcierto local aún podría haber sido mayor si Cardinal no hubiera perdonado el tercero para los de Duda, acción que haría reaccionar al conjunto de Redondo. ‘Si no despertamos, nos pasan por encima’, pensarían los futbolistas viendo las facilidades con las que se encontraba el Pozo Múrcia para generar peligro.
A partir del 3’ de partido, Catgas Energia comenzaba a venirse arriba y el hecho de aprovechar su primera ocasión le beneficiaría claramente. En una triangulación con Rafa López i Corvo, Salgado (4’) recortaba distancias (1-2) para abrir una fase del encuentro con alternativas claras. Rescia y Salgado perdonaban las tablas, igual que Pito en un remate enviado al palo por el jugador murciano.
Al final, en un nuevo error de precipitación, Catgas Energia volvería a ser castigado antes del descanso. Fernando (16’), en una rápida transición, se encargaba de convertir el 1 a 3 con el que se llegaría al ecuador de la eliminatoria (1-3). El conjunto de Redondo se marcaba a los vestuarios con deberes por hacer y dando una sensación de irregularidad nada buena para remontarle un partido a un grande.
Los postes evitan la prórroga
Para volver a creer, la formación colomense necesitaba un impulso, o bien de la grada o en forma de gol tempranero. Éste llegaría a través de la segunda opción: una jugada definida por Salgado (21’) con un disparo cruzado que alentaba de nuevo las aspiraciones catalanas (2-3).
Cuando peor lo pasaba el Pozo, la polémica aparecería con fuerza en el parqué del Pabellón Nuevo. Con Dani Salgado (24’) tendido en el suelo a dos metros del área murciana, los de Duda armaban un contraataque que suponía el 2 a 4 de Cardinal (2-4).
El gol del pívot portugués encendería completamente la mecha de las protestas del público de Catgas, incrementando la tensión en pista. Obligado a arriesgar, el bloque de Óscar Redondo dejaría huecos en defensa, viéndose Javi Rodríguez obligado a salvar el quinto del Pozo bajo los palos.
Con el paso de los minutos, la cuota de posesión favorable a los visitantes iría perdiendo peso y el partido empezaría a convertirse en un asedio colomense. A cuatro para el final, Sepe se encontraba con la madera, impidiendo ésta que Catgas se pusiera a un solo gol del empate.
Ya sin nada que perder, Redondo introdujo el portero-jugador en el 37’ y justo después Corvo volvía a ver como un disparo suyo salía escupido por el poste. Al final, las dianas de Bebe (40’) y Sergio (40’) conseguidas casi al límite del cronómetro no serían determinandes en el computo global del partido. Los dos regalos iniciales castigados por el Pozo con el 0 a 2 acabarían marcando los cuartos de final. Catgas Energia cae eliminado de la Copa, mostrando de nuevo su carácter valiente.
Ficha técnica
Catgas Energia (3): Prieto, Sepe, Corvo, Rafa López, Salgado, Pablo Del Moral, Javi Rodríguez, Rescia y Sergio.
El Pozo Múrcia (5): Fabio, Cardinal, Andresito, Bebe, Álex, Miguelín, Fernando, Raúl Campos, Pito y Marinovic.
Goles: 0-1: Rafa López en pròpia (1’); 0-2: Miguelín (2’); 1-2: Salgado (4’); 1-3: Fernando (16’); 2-3: Salgado (21’); 2-4: Cardinal (24’); 2-5: Bebe (40’); 3-5: Sergio (40’).
Incidencias: partido correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Rey, disputado en el Pabellón Nuevo ante unos 1.200 espectadores.